La Topadora mantiene la curva ascendente y aspira a seguir de largo en la tabla. Con una actuación muy consistente dio cuenta con holgura de Paraguayo y visitará en la próxima fecha al puntero Puerto Nuevo por puntos decisivos.
De
entrada libretos diferentes. Liniers tomó el control con el poder de su caudal
individual. Lynch, Dimotta, Exequiel Ortíz, Víctor López con sensación de
peligro inminente. La visita apostó al pelotazo tratando de sorprender de
contra. Con todo, la primer situación clara llegó recién a los 22 a través de
un centro de Godoy que conectó Dimotta de cabeza para exigir un vuelo
espectacular del arquero. Fue el anticipo, porque 5 minutos después se proyectó
Dimotta y su envío fue empalmado por Ian Lynch, que con violento remate abrió
el marcador. No hubo reacción del equipo guaraní, que al verse superado recurrió
al juego fuerte y acumuló tres amonestados al concluir la etapa inicial.
Liniers manejó el trámite con suficiencia.
Lo
mejor de Paraguayo se vio en el inicio del complemento. Con los cambios el
equipo ganó en penetración. Los desbordes de Carpio, las apariciones de Noguera
comenzaron a intranquilizar. Maidana remató desviado desde posición inmejorable
en la primer llegada visitante. Sin embargo, a los 11 Lynch tuvo el segundo cerca
de un palo. Poco después, a los 16 Casas derribó Grosso dentro del área, vio la
roja por segunda amonestación y Thiago Monzón remató el penal con maestría para
aumentar cifras. El gol destruyó la resistencia de Paraguayo. Liniers no cesó
en la búsqueda. Dimotta, gran figura, sobre los 30 remató al primer palo y
nuevamente el arquero Mesilla se lució enviando al córner. Inmediatamente
Cermesoni recibió de Méndez y con gran cabezazo de emboquillada puso el
tercero. El gol siguió rondando el arco visitante. Combinaron Sallaberry,
Méndez (determinante por derecha) habilitando al debutante Alejandro Quiroga,
cuyo remate fue salvado providencialmente por un defensor cuando se aclamaba el
tanto. Ya sobre el final Paraguayo, que nunca bajó los brazos, fue en busca del
descuento y Víctor López evitó el gol de cabeza. La embestida celeste no tuvo
contención. En la hora desbordó Méndez y Cermesoni con el arco vacío remató por
arriba. Liniers redondeó una soberbia actuación y pudo ganar con más amplitud.
A
partir del encuentro con Central Ballester, a pesar del tropezón con Muñiz, el
equipo fue de menor a mayor y encontrando un funcionamiento que le permite
establecer diferencias con sus rivales. Solidez defensiva, una transición
rápida y ambición ofensiva. Recambios que no resienten el andamiaje.
Envión
anímico con efecto futbolístico. Se viene Puerto Nuevo, el insospechado
puntero. Ganar significará pelear la punta en las fechas finales.
Liniers a Campana en viaje a la ilusión.
Víctor Marinelli
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