La curiosa historia de Central Ballester

Una historia muy particular de lucha, sacrificio, amor e ideales que merece ser contada. El 26 de octubre de 1974 nace el Club Social y Deportivo Central Ballester de un desmembramiento del Club Central Argentino, que por entonces militaba decorosamente en Primera C, pero que había resuelto desafiliarse, luego de competir desde la década del 30 en torneos oficiales. Con la idea de seguir ligados al fútbol de A.F.A. un grupo de directivos toman los mismos colores, diseñan un nuevo escudo y resuelven afiliarse a Primera D. Los numerosos hinchas que seguían al viejo “Central”, casi ni sintieron el cambio. Ya en el primer año el renovado club pelea palmo a palmo el ascenso con Tristán Suárez y Deportivo Merlo, que finalmente lograron la ansiada meta. Originalmente utilizó el predio que arrendaba su antecesor en Italia al 1100 de Villa Ballester, casi inexpugnable y colmado siempre de espectadores. Pero sólo por unos años, ya que fue desalojado. Casualmente el último partido oficial que jugó Central Ballester en esa cancha fue frente a Liniers, a fines de 1980. Sin reducto propio, las penurias llegarían hasta sufrir la desafiliación en 1988. No obstante, con mucho esfuerzo, logra inaugurar en Yapeyú y de la Cárcova, en José León Suárez, un nuevo estadio, donde produce su mejor campaña en 1996, que le permitió el ascenso a Primera C en recordada final frente a San Martín de Burzaco, en cancha de Justo José de Urquiza. Eran tiempos en que el “Canalla” parecía resurgir de sus cenizas. Pero un solo año duró la alegría, retornando a la D rápidamente. Al poco tiempo, por malos manejos dirigenciales pierde cancha y sede social (que por unos años tuvo en Chilavert), y con graves problemas institucionales y económicos, en el peor momento de su corta historia, un grupo de socios, de la mano del Sr. Fernando González, le dan nuevo impulso al club. Cambian la imagen institucional, obtienen tierras en José León Suárez y mejoran sustancialmente el aspecto futbolístico. Es así, que en esa idea de crecimiento, Central Ballester, que para muchos sigue siendo “Central” y para otros más jóvenes es el “Canalla”, espera contar pronto con estadio propio y consecuentemente poder ascender de categoría.